Disney Frozen II Scooter

The move to an "adult" scooter

El paso a un patinete "de mayor"

07/01/2023

Tania

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The model with the decoration, even embossed on the metal itself, from Frozen II is already a sufficiently attractive claim for girls who love the movie. We went from the typical three-wheeled models, more stable, to playing and discovering our own balance on two. The girl is a little insecure at first but soon she discovered the advantages of going and driving a scooter "grown up" much faster. The non-slip floor leaves a rough texture on the metal (it is not a sticker on the base) I find it very safe to avoid slipping. And the brake on the rear wheel makes it more spontaneous to use and easy to reflexes. But they have to get used to it... We really miss a leg to leave it supported and balanced on the ground. It seems essential to me because if you don't have to leave it resting on something by its nose and with the wheels, it slides by itself and you have to put a stop on it. A bit of a pain to make stops while they're not playing with him. The assembly and adaptation to the height of the girl is very comfortable, although since it is with a spike system in the hole and not with a key adjustment, it moves a little while in use. It stays less firm, at least on the handlebars.We are still discovering the folding system because it is not typical. Well, I guess until we get the hang of it. Anyway, put as a gift from Kings, it has been a success!

El modelo con la decoración, incluso en relieve sobre el propio metal, de Frozen II es un reclamo ya suficientemente atractivo para las niñas que les encanta la película. Pasamos de los típicos modelos de tres ruedas, más estables, a jugar y descubrir el propio equilibrio sobre dos. La niña va un poco insegura al principio pero en seguida descubrió las ventajas de ir y manejarse en un patinete "de mayor" mucho más rápido. El suelo antideslizante deja una textura rugosa sobre el metal (no es una pegatina sobre la base) me parece muy seguro para evitar resbalones. Y el freno sobre la rueda trasera lo hace más espontáneo de usar y fácil a los reflejos. Pero tienen que acostumbrarse... Echamos mucho de menos una pata para dejarlo apoyado y en equilibrio en el suelo. Me parece imprescindible porque si no hay que dejarlo apoyado sobre algo por narices y con las ruedas, se desliza solo y hay que ponerle tope. Un poco rollo para hacer paradas mientras no juegan con él. El montaje y la adaptación a la altura de la niña es muy cómodo, aunque al ser con sistema de pincho en el agujero y no con ajuste de llave, se mueve un poco estando en uso. Se queda como menos firme, al menos en el manillar. Todavía estamos descubriendo el sistema de plegado porque no es el típico. Bueno, supongo que hasta que le cojamos el tranquillo. De todos modos, puesto como regalo de Reyes, ha sido un acierto!